Galerías recomienda

John Wick 4


La cuarta parte de la saga dirigida por Chad Stahelski es uno de los estrenos más esperados por los fans de Keanu Reeves, quien regresa para encarnar al legendario asesino a sueldo John Wick, conocido como Baba Yaga en el bajo mundo. Su popularidad no ha hecho más que incrementar a casi diez años del estreno de la primera película (2014) y el personaje es ya un ícono de la cultura pop.

 

Nuestra reseña

 

La cuarta parte supera por mucho a sus predecesoras. El atributo principal de esta saga es la acción con escenas inspiradas en el anime y cintas de artes marciales, sin embargo, en esta entrega son más largas y violentas: hay apenas una breve pausa para engañar y hacer creer que la pelea ha terminado, cuando está lejos de ser así. Este recurso resulta un poco cansado, pero logra mantenerte al borde del asiento.

 

Igualmente, la película parece burlarse de sí misma (de forma menos sutil que en las entregas anteriores) al exagerar varias escenas que terminaron resultando graciosas y dan, hasta cierto punto, alivio ante una grave situación para luego volvernos a involucrar de golpe en peleas con un tono más serio, como una forma de hacernos ver que nuestro querido asesino en realidad no la está pasando nada bien.

 

Si hay algo que uno debe tener siempre presente con John Wick es la razón del inicio de toda esta barbarie: la muerte de su perro y los efectos que esto trajo. El can representaba la esperanza de poder salir adelante tras la muerte de su esposa y, al ser asesinado, representó la destrucción de esa esperanza y la privación de poder volver a ser feliz. Al ser arrebatada esta oportunidad se desencadenaron una serie de consecuencias que se hicieron cada vez más grandes y es en esta entrega donde las vemos en su punto más álgido y trágico.

 

Por supuesto, las actuaciones no se quedan atrás. Si bien Keanu Reeves interpreta a un hombre de pocas palabras, esta falta de diálogos se ve bastante compensada con su alto desempeño en las escenas de acción, donde es capaz de expresar cansancio, determinación, molestia y melancolía a través de su lenguaje corporal. En cuanto a las nuevas incorporaciones, Donnie Yen en su papel de Caine es el que más sobresale, no solo por su habilidad en las artes marciales, sino por la química que tiene con cada uno de sus compañeros y el impacto intimidante que genera su presencia, mientras que Bill Skarsgård se adueña completamente de su rol como el antagonista, lo que tiene como resultado un personaje sumamente detestable y arrogante.

 

NO TE PIERDAS JOHN WICK 4 EN CINEMEX Y CINÉPOLIS DE TU CENTRO COMERCIAL GALERÍAS